Un año más, Jesús llega a nuestro corazón. En esta ocasión a un corazón que simboliza el gran Amor que Dios nos tiene y que lo representa en el envío de su hijo, Jesucristo, a este mundo tan necesitado de compasión, solidaridad, esperanza, unidad, amor y compromiso.
Juntos hacemos camino, juntos podemos hacerlo, juntos iremos creando esperanza en un Adviento que vaya configurando en nuestra vida la llegada de Jesús de Nazaret.
Tejamos nuestros latidos con la esperanza de la llegada de Jesús.